La compañía llevaba siete años ejecutando obras en
el astillero ferrolano
La plantilla
de Turmoil, firma que se encuentra en concurso de acreedores y a la que
Navantia ha retirado sus obras en la división de Reparaciones debido precisamente
por esa coyuntura, podría ser incluida en un ajuste temporal de empleo. La
aplicación del expediente de regulación permitiría a los operarios no perder
sus puestos mientras que el administrador de la empresa, con sede en Narón,
prepara un plan de viabilidad para la misma.
La
aprobación de un programa de futuro es uno de los requisitos exigidos por
Navantia para poder volver a trabajar en el astillero ferrolano, en donde
llevaba siete años ejecutando obras.
Inicialmente,
la empresa había previsto, según explicaron los representantes de los
trabajadores, la aplicación del ERE suspensivo para los trabajadores
indefinidos, mientras que los temporales iban a ver sus contratos rescindidos.
Sin embargo, la asesoría sindical de la plantilla ha informado de que los
contratos de los operarios temporales se encontraban en fraude de ley, por lo
que Turmoil tendrá que regularizar su situación y convertirlos en indefinidos.
Así, en principio los cuarenta trabajadores de la empresa, que desarrollaba
obras de montaje para la división de Reparaciones, tendrían que ser incluidos
en el ERE temporal anunciado.
Los
trabajadores celebraron ayer una asamblea para abordar estos asuntos.
Dos meses
sin cobrar
Turmoil
presentó concurso voluntario de acreedores a finales de septiembre debido a un
embargo con Hacienda. Sin embargo, los trabajadores continuaron acudiendo todos
los días a sus puestos, convencidos de la viabilidad de la firma y ya que
sostienen que manteniendo la actividad podrían superar el bache del concurso. Y
ello pese a que se les adeudan dos meses y medio de nóminas.
Sin embargo,
a principios de este mes Navantia comunicó a la firma que no puede continuar
trabajando en el astillero ya que la ley no permite a las empresas públicas
subcontratar a firmas en concurso de acreedores. Los trabajadores de Turmoil se
sientes discriminados por ello.
Fuente: La Voz de Galicia